NARBONA Y CRAIG, PERO… TAMBIÉN MUCHO DE IONESCO
NARBONA Y CRAIG, PERO… TAMBIÉN MUCHO DE IONESCO Lillian Calm escribe: “Yo tampoco entendí la frase. Todavía no la entiendo, aunque transcurren las semanas y los acontecimientos. Pero he dormido tranquila. Ni siquiera, como muchos otros, repasé a todos los Narbona y los Fontbona de la web . Pero en cambio releí a Ionesco, gran exponente del absurdo”. Resulta fácil comprobar que ni siquiera el caso Jadue, ni el mega operativo anti-delincuencia, ni peor aún una vez más el asesinato de un carabinero o la irrupción del Partido Comunista en la testera de la Cámara de Diputados, han logrado silenciar el tema. Así sesudos connacionales han procurado desentrañar esa única frase presidencial, con el mismo ahínco como si del oráculo de Delfos se tratara: más Narbona, menos Craig . ¿Cuántas horas-hombre se han destinado, como asimismo espacios en prensa, radio, televisión y redes sociales, solo a adivinar el acertijo? ¿Qué quiso decir el mandatario? ¿Cuántas teorías se han tejido al res